OSVALDO AMBIELA, como muchos, comenzó con un gusto por el dibujo desde chico, teniendo la oportunidad de concurrir a las clases que ofrecía en la Biblioteca Ameghino don Juan Orlando Paladino.
Siempre, insiste en no ser un artista plástico, sino un ensuciador de cartones…
Retomó su afición en el taller de la Casa de la Cultura de General Rodríguez, con el maestro Luis Nápoli, supo atesorar lo recibido y guarda de esa época los mejores recuerdos.
Osvaldo se califica como un INCOSTANTE dado que incursionó, además de las distintas disciplinas de la pintura, en platería y en cerámica.
Se autodefine como un hacedor de muchas cosas; obtuvo mucho placer al realizar una Muestra de trabajos en "comic" en la que el público le agradeció porque se había divertido a partir de esa producción…
Aunque, creemos, que lo que más define a Ambiela es esta Oración del Artista Plástico que nos hizo llegar para la presentación de su Charla de Café:
Señor Dios
glorioso y bello,
vestido de luz y de hermosura.
Has puesto en mi interior
el gusto por la belleza.
Me diste un corazón sensible
y una mente abierta.
Gracias Señor.
Esos dones que me regalaste
son para cumplir una misión.
Me llamaste
para compartir con los demás
la belleza que percibo,
para transmitir algo bueno
a través de mis obras.
Me pides que ayude a los otros
a percibir los colores, las formas,
los ritmos de la realidad,
para que tomen conciencia
del mundo que habitan,
para que intuyan su misterio y su luz escondida.
Ven Señor
infinito artista.
Ayúdame a reconocer tu hermosura,
tu grandeza reflejada en las obras que creaste.
Enséñame a descubrir
los rastros que dejaste
en cada criatura.
Y bendice mi obra Señor,
para que brinde a los demás
un poco de felicidad y de consuelo,
un estímulo para vivir,
un momento de asombro.
Quédate conmigo Señor,
llena mis ojos con tu luz
Y trabaja junto a mi. Amén.
OSVALDO AMBIELA